Un hombre enfrenta una sentencia de 15 años de prisión por abusar sexualmente de su propia hija durante siete años. La agente fiscal Carmen Bogado logró esta condena por abuso sexual en niños, coacción sexual y violación, tras demostrar que los abusos comenzaron cuando la víctima tenía apenas 11 años.
Estos hechos se desarrollaron en una casa en el centro de la capital, desde 2013 hasta 2020. Los abusos ocurrían cada 2 o 6 meses, principalmente durante las vacaciones de verano e invierno, cuando la niña visitaba a su padre.
Durante el juicio, la fiscal Bogado detalló cómo el acusado manipulaba y coaccionaba a su hija, diciéndole que los abusos eran normales y amenazándola para que guardara silencio. Estos actos atroces no solo causaron un profundo daño psicológico a la víctima, sino que también reflejan el peligroso abuso de confianza por parte del padre.