La Operación llevada a cabo por la SENAD y el CODI en Canindeyú, destruyó 159 toneladas de marihuana y 14 campamentos criminales, afectando económicamente al narcotráfico en 4,7 millones de dólares.
En Canindeyú, la Operación Basalto III reforzó la lucha contra el tráfico de marihuana con acciones conjuntas entre las fuerzas paraguayas y brasileñas. Coordinada por estas instituciones, la operación tuvo lugar en zonas como Yby Pytã y Colonia Yerutí, donde ya se ha desmantelado un total de 14 campamentos vinculados a organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico.
La intervención, liderada por el fiscal Néstor Narváez, logró la destrucción de 159 toneladas de marihuana, incluyendo plantaciones y droga lista para su distribución. Este golpe a las estructuras criminales, conocidas por generar violencia en la región, representa un daño económico estimado en 4,7 millones de dólares.
Uno de los puntos clave de la operación fue la captura de Selva Portillo, una figura clave en la producción de marihuana a gran escala en la zona. A medida que la operación avanza, se espera continuar con las incursiones en las áreas afectadas, intensificando la presión sobre el narcotráfico en Canindeyú.