La empresa constructora presentó una denuncia contra el exdiputado Orlando Arévalo, su esposa Carol González y la fiscal Sandra Ledesma, acusándolos de tráfico de influencias, extorsión, lavado de dinero y de asociación criminal.
El abogado de la empresa, Rodrigo Cuevas, detalló en AN primera edición que el conflicto surgió a raíz de la construcción de una mansión para la pareja, cuyo costo total ascendía a G. 2.400 millones. De esa suma, se abonaron G. 2.000 millones y quedó un saldo pendiente de G. 400 millones.
➡️“En vez de pagar, monta una denuncia colocándose él en carácter de víctima”. Sobre la denuncia de la constructora a Orlando Arévalo.
— América Paraguay (@AmericaTVPy) February 10, 2025
Según la acusación, en lugar de cumplir con el pago restante, Arévalo optó por presentar una denuncia en contra la constructora, estrategia que, de acuerdo a Cuevas, buscaba posicionarlo como víctima en el caso: “En vez de pagar, monta una denuncia colocándose él en carácter de víctima”, afirmó.
Así mismo, resaltó irregularidades en la forma de pago, ya que se entregó en efectivo y en maletines, sin ninguna trazabilidad bancaria. Esto generó sospechas sobre el origen de los fondos y los ingresos de Arévalo: “Esta gente realizó una construcción que no puede o no tiene forma de sostener con los papeles el sueldo de diputado”, sostuvo el profesional.
Finalmente, advirtió que la investigación podría revelar una estructura más amplia de presuntas irregularidades. “Se va a encontrar que todo tiene relación y este esquema estuvo y está operando desde hace un buen tiempo”, concluyó.