En Paraguay, el miércoles pasado, se reportó una explosión y un derrame de amoníaco en la fábrica de embutidos Ochsi en la ciudad de San Lorenzo. Según el Instituto de Previsión Social, varias personas que estuvieron expuestas a la sustancia están siendo atendidas en el hospital. De estas 30, siete están bajo ventilación asistida. Uno de los pacientes tiene el 80% de su cuerpo quemado.
El doctor Carlos Morínigo, gerente de salud del IPS, informó que continúan recibiendo a los trabajadores afectados por el amoníaco, con un total de 30 hasta el momento, algunos de los cuales han requerido ingreso a terapia intensiva debido a la inhalación del gas. Pero nos preguntamos ¿Qué tan fuerte puede ser?
¿La inhalación de amoníaco puede provocar la muerte?
Según se explica a través de diversos sitios de información especializada, permanecer en una atmósfera que contiene amoníaco a una concentración de 1500 ppm conduce a la muerte en 30 min. En la proximidad de un derrame de amoníaco (gas), la muerte suele producirse por asfixia, congelamiento, extensas quemaduras químicas de la piel o abrasamiento debido a la ignición de la fuga.
¿Qué hacer en caso de intoxicación con amoníaco?
Contacto con los ojos: Enjuagá inmediatamente con abundante agua por al menos 30 minutos, levantando los párpados superiores e inferiores. Retirá los lentes de contacto al enjuagar. Buscá atención médica inmediata.
Contacto con la piel: Sumergí la parte afectada en agua tibia. Busque atención médica.
Inhalación: Retirá a la víctima del lugar de exposición. Iniciá la respiración de rescate (utilizando precauciones universales) en caso de paro respiratorio y la reanimación cardiopulmonar en caso de paro cardíaco. Trasladá sin demora a la víctima a un centro de atención médica. Debido al riesgo de edema pulmonar tardío se recomienda observación médica por 24 a 48 horas después de la exposición excesiva.
Fugas de amoníaco que ya ocurrieron en otros países:
Uruguay:
En diciembre del 2023, se registró la explosión de un tanque de amoníaco en un frigorífico. La zona de las avenidas Vélez Sarsfield y Osvaldo Cruz fueron cortadas por el operativo de la Policía y el SAME. El hecho dejó al menos unas 100 personas intoxicadas de la planta, quienes debieron ser evacuadas ya que afectó a más de cuatro manzanas de la zona.
Argentina:
4 de diciembre del 2023. Por un accidente, 90 obreros fueron intoxicados con amoníaco en un frigorífico porteño. El grave episodio ocurrió en el barrio de Barracas y obligó a evacuar a unos 300 vecinos y seis manzanas. Se debieron cortar dos cuadras a la redonda como medida preventiva y se evacuaron 300 personas.
Estados Unidos:
Mayo, 2023. El trabajo de Mimi Perkins en el turno de noche en una planta avícola de Tyson Foods comenzó como cualquier otra noche: Lavar con manguera la sangre, las vísceras y las plumas sueltas que dejaron cientos de miles de pollos muertos. Entonces, escuchó un solo estallido fuerte.
La soldadura de una tubería en la planta se había roto, llenando la habitación con una nube blanca de gas amoníaco, un químico usado para refrigerar la carne que puede ser mortal en altas dosis. Mientras otros trabajadores huían, Perkins perdió el conocimiento y quedó atrapada dentro de la planta durante unos cuarenta minutos mientras el gas le devastaba los ojos, la garganta y los pulmones.
Cuando un colega finalmente la arrastró afuera, Perkins tenía quemaduras químicas rojas en la cara y la pierna. Escuchó que un paramédico se refería a ella como “DOA”: Muerta al llegar. En los años transcurridos desde el accidente de 2016, Perkins se ha sometido a múltiples cirugías de garganta y dos trasplantes de córnea, toma seis tipos de gotas para los ojos y sufre ataques de tos crónicos que le dificultan la respiración.
Si bien las lesiones de Perkins fueron extremas, se encontraba entre las docenas de empleados de Tyson Foods, una de las compañías empacadoras de carne más grandes de Estados Unidos, que resultaron lesionados por fugas de amoníaco durante la última década, según descubrió una investigación de CNN.
Las plantas de Tyson han experimentado al menos 47 fugas de amoníaco entre 2012 y 2021, lo que provocó casi 150 lesiones en los trabajadores.