En un reciente informe elaborado por el Cen­tro de Estudios Eco­nómicos (CEE) de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), se analizó el impacto de las remesas en Paraguay, y desta­caron tanto sus ventajas como los desafíos que plantea en el contexto migratorio actual.

Las remesas, definidas como transferencias de dinero rea­lizadas por personas que resi­den en el extranjero, repre­sentan un flujo significativo para la economía nacional. Son cuatro los países que concentran el 87 % del total de las remesas enviadas a Paraguay: España, con USD 388 millones (64 %), Estados Unidos con USD 83 millones (13 %), Argentina con USD 36 millones (6 %) y Brasil con USD 33 millones (5,5 %).

Entre 2014 y 2023, el prome­dio anual de remesas alcanzó los USD 523 millones. Hasta mayo de este año, las reme­sas ya representan la mitad de esta media, lo que sugiere que 2024 podría convertirse en el año con mayores ingre­sos por remesas en la historia del país. 

Noviembre, marzo y diciembre se destacan como los meses con las mayores transferencias.

Julio Fernández, econo­mista jefe sénior del Cen­tro de Estudios Económicos de la UIP, resaltó la relación entre el nivel de desarrollo y las remesas, observando que existe una correla­ción inversa: los países con mayor Índice de Desarrollo Humano (IDH) suelen reci­bir menos remesas como por­centaje del PIB.

“Mientras que países como Chile, Costa Rica y Uruguay reportan menos del 1 % del PIB en remesas, países con menor desarrollo como El Salvador y Honduras, reci­ben cifras que superan el 25 % de su PIB”, comentó.