El gobierno español reconoció este martes, de forma oficial, al Estado de Palestina, decisión tomada en Consejo de Ministros y anunciado previamente. Según el mandatario Pedro Sánchez, la postura “no va contra nadie, y menos contra Israel”, esperando ver una Palestina que incluya Cisjordania y Gaza, con Jerusalén Este como capital, obviamente gobernada por la Autoridad Nacional Palestina (ANP).

Sánchez afirmó que no reconocerá ninguna variante en las líneas fronterizas de 1967, que no responda a un acuerdo entre las partes. Así también, los países como Noruega e Irlanda, dieron el mismo paso en sus convicciones sobre la situación.

“España se sumará a los más de 140 países que ya reconocen a Palestina como Estado, es una decisión histórica con el único objetivo de contribuir a que israelíes y palestinos alcancen la paz” comenzó diciendo el mandamás del país de las castañuelas. Entre otras cuestiones, agregó: “Es una necesidad perentoria para lograr la paz, es la única manera de avanzar hacia la solución que reconocemos como la única posible para la paz, un Estado palestino junto a otro israelí”

Respecto al grupo terrorista, dijo: “Hamás está en contra de la solución de dos Estados”. Por otra parte, el ministro de asuntos exteriores israelí, Israel Katz, acusó al gobierno de España de “incitar al genocidio judío”. En tanto, su par José Manuel Albares, respondió: “Mi colega israelí lleva muchos días con provocaciones y con bulos deleznables en redes sociales hacia nuestro Gobierno, el de Irlanda y el de Noruega, él querría que hoy, en vez hablar de un Estado palestino, estuviéramos hablando de los tuits y provocaciones”.

“La normalización de los Estados árabes con Israel siempre está en la mesa, espero que sí haya avances, pero todo está ligado al alto el fuego, a partir de ahí todo es posible, es imposible que nadie mueva un dedo” añadió Albares.

El miércoles, Sánchez recibirá en Madrid al primer ministro palestino, Mohammad Mustafah, y a los ministros de Exteriores de Catar, Jordania, Arabia Saudí y Turquía, y al representante de la Conferencia Islámica, que acuden a una reunión con el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares.