El hombre identificado como Lorenzo Ferreira Monges, de 94 años, permanecerá en arresto domiciliario tras confesar el homicidio de su yerno. La jueza Marcela Mallorquín dictó la medida mientras se desarrolla el proceso judicial, que podría convertirlo en el preso más longevo del sistema penitenciario.
La justicia decidió que Lorenzo Ferreira Monges, un hombre de 94 años, guarde reclusión en su domicilio mientras dura el proceso judicial en su contra por el asesinato de su yerno, Miguel Irala Rivas, de 45 años. La jueza penal de Garantías, Marcela Mallorquín, ordenó el arresto domiciliario del anciano imputado por homicidio doloso.
El trágico suceso ocurrió en Potrero Villar, distrito de Coronel Martínez, departamento de Guairá. Tanto Ferreira Monges como su yerno residían en la misma casa. De lunes a viernes, se quedaban solos, ya que la esposa de Irala Rivas trabajaba en Asunción y solo regresaba los fines de semana.
Ferreira Monges solía reprocharle a su yerno su adicción al alcohol, lo que provocaba frecuentes discusiones entre ambos. Según los testimonios, el pasado jueves por la mañana, el anciano encontró a su yerno bebiendo desde temprano y lo recriminó por su holgazanería. Irala Rivas reaccionó con ira, desafiando a su suegro.
Ambos se enfrentaron como en los viejos duelos de película, y cada uno fue a buscar su arma. A pesar de su avanzada edad, Ferreira Monges logró adelantarse y disparó cuatro veces contra su yerno. “Fui más rápido”, habría declarado el anciano a la policía.
El fiscal Rodrigo Marsek está a cargo de la investigación. En caso de una eventual condena por homicidio doloso, Lorenzo Ferreira Monges podría convertirse en el recluso de mayor edad en el sistema penitenciario del país.