Paraguay concretó un hecho histórico con el nacimiento de DanceSport Paraguay, el primer club de baile deportivo del país que cuenta con el reconocimiento de la Secretaría Nacional de Deportes (SND) mediante la Resolución N.º 1626/2025. La decisión abre el camino para institucionalizar el baile deportivo como disciplina y marca el ingreso formal del Ballroom al territorio nacional.
La presentación oficial se realizará el sábado 13 de diciembre, a las 20:30 h, durante la Gala de Ballroom 2025 en el Salón Multiuso de la SND. El evento reunirá a artistas invitados y exhibirá por primera vez ante el público paraguayo las modalidades competitivas que integran el DanceSport.
El baile deportivo, reconocido por la World DanceSport Federation (WDSF), combina rigor técnico, exigencia física y expresión artística. Incluye categorías como Ballroom, con sus divisiones Standard y Latin; y el Breaking, que recientemente se incorporó al programa olímpico.
Una apuesta por la profesionalización de bailarines y entrenadores.
En ese marco, DanceSport Paraguay definió como misión profesionalizar a bailarines y entrenadores mediante programas de capacitación continua y proyección internacional para los atletas. Como paso inicial, la organización desarrolla la Formación Nivel 1 en Ballroom, que dirige la instructora argentina Natalia Carabajal. Así, los participantes avanzarán en módulos de Samba, Cha Cha Chá y Rumba, con énfasis en técnica, musicalidad y principios de entrenamiento deportivo.
El presidente de DanceSport Paraguay, Carlos Barreto, explicó que la primera etapa busca instalar y difundir el baile deportivo a nivel nacional.
“Nuestro objetivo, en una primera etapa, es difundir y promover el baile deportivo en todo el país, para luego posicionar a Paraguay dentro del circuito internacional, brindando a los bailarines la oportunidad de desarrollarse como atletas y artistas al mismo tiempo”, expresó.
Además, la llegada oficial del Ballroom abre nuevas oportunidades para el talento local. Este estilo, apreciado por su elegancia y precisión, incorpora valores como la disciplina, la coordinación y la constancia, aspectos que sus impulsores destacan como fundamentales para los jóvenes.
Con esta iniciativa, Paraguay inicia una etapa inédita para la danza competitiva y se posiciona en la región con una propuesta que une deporte, arte y desarrollo cultural.

