Es la primera reunión en persona que tuvieron en este año los líderes de EE.UU. y China. En San Francisco, acordaron una serie de temas para distender la relación bilateral en tensión desde la llegada de Biden a la Casa Blanca.
“Que tengamos una competencia no debe significar que entremos en conflicto”, le dijo Joe Biden y Xi Jinping en San Francisco. Los dos líderes mundiales se reunieron durante 4 horas en privado. Fue el primer encuentro cara a cara en todo este año.
El objetivo de la reunión fue “modesto” pero sumamente necesario: seguir limando las asperezas entre Washington y Beijing desde la llegada del demócrata a la Casa Blanca. Tal vez, el punto más importante es que acordaron reconstituir el contacto directo entre ambos líderes luego de un tiempo interrumpido por cortocircuitos, como por ejemplo, por el caso “Taiwán”.
“Darse la espalda no es una opción”
El líder chino también llevó un mensaje contemporizador a San Francisco. Los contactos previos – durante un año – entre las cancillerías permitieron este marco de distención necesaria para la relación bilateral.
Hablaron sobre una serie de temas, algunos de los cuales, no trascendió exactamente el contenido. El más urgente, para los ojos del mundo, es el conflicto en Medio Oriente. Estados Unidos llegó a la reunión con el interés de mantener a China como hasta ahora: un observador del conflicto, sin tomar partido declarado en el enfrentamiento entre Israel y Hamas.
Un tema importante para la agenda bilateral fue el fentanilo. Es la droga que está causando graves problemas en la actualidad en los Estados Unidos. Hay una ruta que se inicia con la producción en China para llegar a los EE.UU. por medio de México. Por eso, en el marco de la reunión de la APEC, Cooperación Económica Asia-Pacífico, el presidente mexicano López Obrador hablará de ese tema con el propio Xi Jinping.
Taiwan, el tema más complejo
Xi Jinping se mostró enérgico en este punto. Le dijo a Joe Biden que no continuara con el suministro de armamento a la isla de Formosa, porque el proceso de unión de toda China es “inexorable”. Biden recordó que los Estados Unidos solo reconocen como país a China comunista, pero que van a mantener su apoyo a los nacionalistas en Taiwán.
El “blooper de Biden”: Xi Jinping es un dictador
Joe Biden dijo en la reunión de 4 horas: “Es primordial que usted y yo nos entendamos claramente, de líder a líder, sin malentendidos ni errores de comunicación”. Esto se traducirá en el regreso del diálogo o la comunicación permanente entre la Casa Blanca y el gobierno de Beijing.
Luego le dijo a los periodistas que se considera el líder mundial que más veces ha estado con Xi jinping y que lo conoce muy bien.
Fue cuando protagonizó un “blooper” o al menos, no fue el mejor momento para sincerarse. Cuando le preguntaron si Xi Jinping un dictador dijo: “Miren, lo es. Es un dictador en el sentido de que es un tipo que dirige un país comunista basado en una forma de gobierno totalmente diferente a la nuestra”.
Y tal vez, para matizar – de todas maneras china rechazó la definición del mandatario norteamericano, Biden se moderó cuando le preguntaron si confiaba en él, respondió: “Hay confianza, pero que se debe verificar”.