En las costas de México, una tormenta frente a las costas se convirtió el miércoles en la tormenta tropical Alberto, la primera con nombre en temporada de huracanes del Atlántico. Pese a que presentaba vientos máximos sostenidos de 65 km/h, las principales preocupaciones se instalaron por las precipitaciones de 30 centímetros o más, previstas para partes de Texas y México.

Por supuesto, se emitieron alertas meteorológicas para las zonas costeras de Texas y el noreste de México. El miércoles, la tormenta se encontraba en el Golfo de México, transitando hacia el oeste, posteriormente al noreste de México, según el Centro Nacional de Huracanes. Los meteorólogos pronosticaron que “Alberto” podría tocar tierra a primera hora de este jueves, probablemente en el estado mexicano de Tamaulipas, con proyecciones que se extendieran mucho más allá.

Estos fueron los primeros datos específicos sobre la tormenta:

  • Las fuertes lluvias continuarán el miércoles en casi toda la costa de Texas, desde el área de Houston hacia el sur.
  • Se espera que una columna de humedad asociada con la tormenta salga del Caribe hacia la costa de Texas, provocando lluvias generalizadas de 15 a 25 centímetros y posiblemente cantidades aisladas cercanas a los 25 centímetros.
  • Se prevé que caigan hasta cinco centímetros de lluvia por hora, lo que podría desbordar arroyos y riachuelos.
  • Otro motivo de preocupación en las colinas de México son los deslaves.

Entre otras cuestiones, se espera que los vientos del este al noreste se fortalezcan gradualmente durante los próximos días. El campo de viento podría ser bastante expansivo, muy al norte del centro.

Es preocupante desde el punto sobre inundaciones, que es inminente en zonas costeras, con una marejada ciclónica de entre 30 y 120 centímetros. Otra amenaza que se tiene en alerta, son las corrientes de resaca, que aumentarán a lo largo de las playas de la costa del golfo en los próximos días.

En este contexto, sin dudas los ciudadanos comenzaron a tomar precauciones, funcionarios públicos están vigilantes en el nivel de las presas, ríos y arroyos, limpiaron los desagües para evitar posibles inundaciones. Trabajadores del gobierno instalaron refugios temporales y más de 1500 electricistas fueron desplegados en Tamaulipas, Veracruz y Nuevo León, tres estados que esperan soportar lo más denso de, “Alberto” para responder a cualquier corte de energía.

“Estamos esperando estas lluvias que son, y van a ser, muy benéficas”, dijo Luis Gerardo González, coordinador de protección civil del estado de Tamaulipas, en el sentido de aplacar el intenso calor, que tuvo como saldo, muerte de 220 primates. La agencia medioambiental del país dijo el martes que, las lluvias habían provocado que las poblaciones de monos aulladores, en la que empezaron a caer árboles a causa del calor en el mes pasado, estuvieran más activas.

Por otra parte,los meteorólogos advirtieron que la temporada de huracanes atlánticos en el presente año, podrían ser mucho más activas de lo habitual. A finales de mayo, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica predijo, entre 17 y 25, tormentas con nombre para este año, cantidad “superior a la normal” y una predicción que concuerda con más de una decena de previsiones realizadas a principios de año por expertos de universidades, empresas privadas y organismos gubernamentales, una temporada típica de huracanes produce 14 tormentas con nombre.