El ahora ex Presidente de la Real Federación Española de Fútbol, renunció al cargo. Todo esto en medio de la polémica ocurrida con Jenni Hermoso.

Luego de tres semanas del incidente, en el cual Luis Rubiales festejó de forma indecorosa con la jugadora de la Selección de España Jenni Hermoso la obtención del Campeonato del Mundo; besándola —supuestamente sin su consentimiento— el dirigente español puso su cargo a disposición.

A través de sus redes sociales, Rubiales dio a conocer el comunicado en el que explica que existen “poderes fácticos” que no le permitirán volver a realizar sus actividades como máxima autoridad del fútbol español.

El caso está siendo estudiado por la Comisión de Disciplina de la FIFA y además, el ex presidente enfrenta una denuncia penal por el supuesto acoso ocurrido en Sidney.

A Rubiales ya le habían “soltado la mano” varios organismos oficiales del deporte en España, además de la condena popular y el repudio de varios exponentes del deporte ante lo ocurrido.