El ministro de Educación, Luis Ramírez, defendió la autonomía del sistema educativo para definir sus horarios escolares y cuestionó que se intente responsabilizar a las instituciones educativas por conflictos sociales que exceden su alcance.

En conversación con los medios de comunicación, el ministro de Educación y Ciencias, Luis Ramírez, se refirió a los reclamos por el horario de ingreso de los estudiantes en invierno, y señaló que el sistema educativo tiene recursos para resolver la cuestión sin necesidad de imponer cambios generales.

Ramírez explicó que modificar el horario escolar no es una cuestión simple:

“Vamos a suponer que decimos todos van a entrar a las ocho y los padres que trabajan a las siete, ¿cómo le van a llevar a sus hijos? Hay que modificar el horario del trabajo de los padres. Si se modifica el trabajo de horario de los padres, ¿qué pasa con el comercio, con las oficinas públicas?”.

Recordó que la legislación ya contempla mecanismos flexibles que permiten adaptar los horarios según la realidad local: “La escuela tiene sus propios mecanismos a través de la creación del Consejo Departamental de Educación en la carta orgánica, donde ese Consejo puede poner el horario e incluso puede modificar el calendario”.

El ministro también destacó que el horario escolar matutino no representa un peligro en términos de seguridad o visibilidad. “La actividad escolar empieza con luz. Ubíquense lo mismo en la tarde: 5:30 de la tarde, oscuro. Y hasta hoy la estadística que hay en materia de seguridad indica que la noche es más insegura que en la mañana”.

Finalmente, sugirió la implementación de un calendario escolar diferenciado por estación: “Yo creo que quizás como concepto tiene que haber un horario de invierno y un horario de verano para la escuela. Un horario de invierno y un horario de verano perfectamente, porque ¿qué sentido tendría en el verano ingresar a las 7:30?”.