El Gobierno de Paraguay promulgó una histórica ley que convierte al país en el líder regional en la lucha contra el abuso infantil. La normativa modifica los artículos 128 y 135 del Código Penal, estableciendo penas más severas y ampliando la protección legal para niños y adolescentes.
La legislación establece que el abuso sexual con coito en menores de 10 años será castigado con una pena mínima de 15 a 20 años, extendiéndose hasta 30 años en los casos más graves.
Además, introduce nuevas tipificaciones de violencia y agrava las sanciones en situaciones específicas.
Con un análisis, Paraguay registra 3.500 denuncias anuales de abuso infantil, con 9 de cada 10 casos ocurridos en el entorno familiar y un 82% de las víctimas siendo niñas. La nueva ley busca enfrentar esta realidad con mayor contundencia y prevención.
Durante el año, operativos liderados por el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia (MINNA) lograron el rescate de 160 niños en situación de riesgo. Sin embargo, también se han intensificado campañas de sensibilización para combatir este flagelo.